Aprobada la Reforma Tributaria en Brasil

El pasado lunes, la Cámara de Diputados de Brasil aprobó el proyecto de reforma tributaria. Es un momento histórico: hace más de tres décadas que se discuten cambios en el complejo y atrasado sistema tributario brasileño, y finalmente el Congreso y el Ejecutivo han conseguido alinearse. La reforma fue apoyada incluso por parte de la oposición. Ahora, se espera que la Cámara vote cuatro puntos destacados en la sesión de hoy y, poco después, la propuesta pasará al Senado, donde las expectativas de aprobación también son altas.

La reforma actual se centra en la fiscalidad sobre el consumo, los productos y el patrimonio; los debates sobre la renta y las inversiones se dejaron para más adelante. La PEC prevé un plazo de 180 días, tras su aprobación, para que la reforma del IR (Impuesto de Renta) sea presentada al Congresos

El principal cambio consiste en unificar cinco impuestos en dos. Dejarán de existir los tres PIS federales, el Cofins y el IPI, elICMS (estatal) y el ISS (municipal). En su lugar vendrán la Contribución sobre Bienes y Servicios (CBS), gestionada por la Unión(Estado Federal), y el Impuesto sobre Bienes y Servicios (IBS), gestionado por estados y municipios.

Tanto la CBS como el IBS son impuestos de tipo IVA(Impuesto sobre el Valor Añadido), por lo que la reforma establece un «IVA dual» (con una parte gestionada por el gobierno federal y otra por los estados y municipios). La ventaja de este impuesto, adoptado en gran parte del mundo desarrollado, es que se cobra sólo sobre el valor final de la venta o consumo del producto, y no en medio de la cadena productiva, lo que simplifica todo y evita el efecto cascada (impuesto sobre impuesto) que se sufría en Brasil. Cada parte de la cadena paga el impuesto sólo por el valor que ha añadido a ese producto final.

También se prevé la creación de un tercer impuesto, el Impuesto Selectivo (IS). Este nuevo impuesto gravará la producción, comercialización o importación de productos considerados nocivos para la saludo el medio ambiente, con el fin de desincentivar su consumo. En este grupo se incluyen los cigarrillos, las bebidas alcohólicas y los pesticidas, por ejemplo.

La versión votada por los diputados también incluye la exención total del IVA para los productos de la canasta básica alimentaria – la medida fue tomada después de que los críticos de la reforma sugirieran que las compras de los más pobres se encarecerían. Ahora deberá debatirse una ley complementaria para definir qué productos se incluyen en esta cesta libre de impuestos.

También hay tipos más bajos o nulos para algunos productos y servicios, como medicamentos, servicios sanitarios y educativos, transporte público, actividades artísticas, algunos artículos agrícolas y otros.

La reforma tampoco afecta directamente a la Zona Franca de Manaus, que continúa con un tratamiento fiscal diferenciado, y tampoco incluye automáticamente a las empresas del Simples Nacional, que podrán elegir entre mantener el régimen actual o migrar.

Por último, hay cambios en los impuestos sobre el patrimonio. La reforma impone una tributación progresiva a las herencias, el tipo aumenta en función del valor heredado. Por último, los ayuntamientos ganarán autonomía para actualizar la base de cálculo del IPTU.

El texto también prevé un largo periodo de transición entre el antiguo y el nuevo impuesto, para que los estados y municipios puedan adaptarse gradualmente. Para el contribuyente, el cambio comienza en 2026, y el PIS, el Cofins y el IPI serán sustituidos ya en 2027 por el CBS. El SII (de estados y municipios) entrará en juego en 2026 con un tipo de prueba del 0,1%,y subirá gradualmente desde 2029 hasta 2033, año de la extinción del ICMS y el ISS.

Los efectos en la atracción y retención de inversiones y en la actividad económica en general podrían ser grandes. Un estudio del Ipea, calculó que la reforma podría generar un crecimiento adicional del 2,39% del PIB

Fuente: VCS/A. Editora ABRIL