Las Cortes de Arbitraje como método eficiente, independiente y de confianza
El pasado martes 25 de junio, la Cámara de Comercio Brasil-España, en colaboración con el Despacho de Abogados, IUS Aequitas, celebró una jornada sobre las Cortes de Arbitraje. Durante los últimos años se ha venido produciendo un notable incremento en las relaciones comerciales y socioeconómicas entre Brasil y España, circunstancia que requiere la existencia de sistemas de resolución de conflictos que garanticen tanto la seguridad jurídica y la igualdad entre las partes, como la confidencialidad de los procedimientos.
El arbitraje internacional reúne esas características, razón por la que resulta necesario que las empresas españolas y brasileñas tengan detallado conocimiento sobre las alternativas existentes, a la hora de someter la solución de su controversia a una u otra Corte de Arbitraje.
Por tal motivo, IUS Aequitas y CCBE compartieron jornada a través de videoconferencia, en la que los representantes de varias Cortes de Arbitraje -brasileñas y españolas- explicaron sus respectivos sistemas de administración de los arbitrajes, los criterios de selección de los árbitros o los idiomas en los que pueden operar, constituyendo una oportunidad para que los responsables jurídicos de las empresas pudieron preguntar al respecto, así como tomar razón sobre las diferentes alternativas existentes de cara a someter la resolución de las futuras contiendas que las compañías tengan que afrontar con algún componente o punto de conexión hispano-brasileño.
En el evento estuvieron presentes Dámaso Riaño, Corte de Arbitraje de Madrid; Patricia Kobayashi, Center for Arbitration and Mediation of the Chamber of Commerce Brazil-Canada; Juan Ramón Montero Estévez, Centro Iberoamericano de Arbitraje; Sylvia Regina Sabino, Conselho Arbitral do Estado de Sao Paulo; María Arias Navarro, Corte Española de Arbitraje; Felipe Moraes, Cámara de Mediación y Arbitraje Empresarial-Brasil.
Damaso Riaño puso sobre la mesa la necesaria elección del Arbitraje como método eficiente, con un promedio de duración de 8 meses, la especialización de los árbitros y la independencia, muy importante en el contexto internacional y, sobre todo, la confianza y la experiencia.
Por su parte, María Arias Navarro introdujo la puesta en marcha de un ambicioso proyecto compartido para aunar esfuerzos y crear una corte de Arbitraje Internacional, con el objetivo de convertirse en el centro del arbitraje comercial. Aseguró María Arias Navarro que “tenemos que esforzarnos para que el arbitraje llegue a las PYMES y que confíen en estos procesos. La labor es más bien pedagógica y cultural”.
En este aspecto, también el arbitraje está creciendo en Brasil en los asuntos públicos, especialmente relacionados con proyectos de alianzas público privadas. Este avance pretende generar mayor confianza y celeridad para las empresas que participan en este tipo de proyectos.